Hoy dimos un caso empresarial muy especial, un negocio familiar de más de 10 años, un local posicionado y un marca tradicional mediamente posicionada fundamentada en el voz a voz. Del otro lado una nueva generación con ganas de devorarse al mundo, nuevas ideas, nuevos sueños y una encrucijada. ¿Continuar, remodelar o iniciar de cero?
Una decisión por la que vale la pena trasnochar. Cuando haces parte de un proyecto del cual no eres el creador seguramente vas a soñarlo diferente, de esa forma todos damos un valor desde nuestro rol, pero cuando somos nosotros los que nos delegan el mando del barco, debemos pensar diferente, es como dejar tu mente en blanco y comenzar a priorizar desde cero. Sin preconceptos, ni criterios personales. Ahora todo depende de ti, pasar de ver a ser visto.
Es ideal darse un espacio para auditar detalladamente todo el negocio. Ver que funciona, que no y como lo puedes transformar. Este proceso es necesario para tomar decisiones racionales, basadas en datos y sobre todo entender el contexto general. Vaya que muchas veces tenemos la mala percepción de ver el lado negativo a todo pero cuando entramos a ver minuciosamente encontramos puntos positivos que unidos podrían ser valor agregado de un nuevo negocio o una nueva linea.
Desarticula el negocio por módulos, valida cada uno muy detalladamente y estructura una visión actual y una visión a mediano o largo plazo. En este contexto comienza a priorizar lineas de negocio(Mira que puedes rescatar y mejorar) y posterior lo más importarte comienza a tomar decisiones.
** Siempre podemos mejorar un proceso visto desde cualquier ángulo. Así sea transformándolo.
He visto negocios familiares que han crecido gracias a nuevas ideas, y nuevos sueños. La mayoría de ellos tienen algo en común: Rescatan el valor de como inicio e integran nuevos valores que conectan con nuevos mercados. También he visto otros que se transforman, y toman nuevos rumbos, o algunos que deciden disolver y enterrarlos.
Lo único que puedo decir al respecto, es que los negocios familiares son poderosos, como las familias entre más unidas llegan a crecer a pasos agigantados, como las familias tienen un lazo espiritual alto que les permite resistir, aguantar y por alguna razón seguir creciendo. Las empresas familiares son lindas, poderosas y como todas tienen desafíos a resolver, pero si alineas un negocio con una base empresarial solida esta deberá resistir generaciones.
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